El arte ha rebasado todas las fronteras, desde hace ya mucho tiempo. Hoy por hoy, el lenguaje artístico vas más allá del caballete o el volumen escultórico, sino que ha incorporado las técnicas digitales para expandir las posibilidades, así como diversos dispositivos y medios.
Todo dispositivo capaz de registrar imágenes ya sea de manera analógica o digital, puede ser utilizado como una herramienta de creación visual. La cámara fotográfica ha sido un gran aliado a este respecto, ya que permite capturar imágenes instantáneas e irrepetibles, registrando un momento que puede convertirse en una obra única.
Pero gracias a la tecnología, la fotografía ha dejado de ser un proceso exclusivo de las cámaras especializadas, para expandirse a los teléfonos móviles y otros dispositivos. Relacionado a esto, un iPhone de segunda mano puede ser una alternativa inteligente.
La fotografía analógica, así como la fotografía que puede realizarse mediante un iPhone segunda mano, no difiere mucho de la pintura en cuanto a lenguaje y composición. Claro, la fotografía digital puede intervenirse con programas especializados, mejorando su brillo, nitidez, enfoque y/o su contraste, pero el centro de la cuestión es el mismo: la calidad artística de la imagen.
En primer lugar, el tamaño y resolución de la cámara y pantalla del iphone son menores. Además, tienen una proporción diferente. Esto significa que hay que prestarle especial atención al encuadre de la imagen, es decir, a lo que se deja dentro y fuera de la captura.
Una vez se ha decidido qué es lo que se incluirá al interior de la imagen, es preponderante decidir la perspectiva, el contraste entre la forma y el fondo, y la utilización de texturas que enriquezcan la imagen.
Pero más allá del talento que se tenga, es posible mejorar la imagen con programas especializados, como Photoshop, Illustrator y otros que pueden descargarse para su versión de móviles.
Estos diferentes tipos de software permiten modificar y corregir todo lo mencionado en el apartado anterior. Es decir, recortar la imagen para un mejor encuadre, alterar la composición, el contraste, mejorar el brillo y resaltar texturas, colores y todo lo que se desee.
De todas formas, se requiere de cierto manejo, sobre todo cuando esta edición se realiza en un iPhone de segunda mano. Es fundamental aprender cómo funcionan estos programas, para sacarle el mejor provecho al sistema y lograr el resultado que se busca.
La práctica hace al maestro, por lo que la dedicación constante es el secreto. La perseverancia y un iPhone de segunda mano hacen una excelente combinación.